Si a un niño de entre 10 y 13 años le duele el talón, aunque también puede aparecer en edad más temprana, lo normal es que estemos hablando de la enfermedad de Sever. Para su diagnóstico, lo primero es acudir a una clínica podológica en Gandía, pero antes de explicar en qué consiste, queremos dejar claro y tranquilizar a los padres que no es grave, ni deja secuelas en el futuro.
El motivo de esta dolencia que tratamos en la Clínica Podológica José Mª Pe Duarte no es otro que el crecimiento irregular de unas partes y otras de los niños, de forma que los huesos crecen más rápidamente que los tendones de alrededor del talón, provocando dolor al hacer actividades físicas como correr o saltar, pero también a diario al caminar.
Es una dolencia que es más frecuente en niños que en niñas, y que requiere, en primer lugar, del diagnóstico de un especialista de la clínica podológica en Gandía. El motivo no es otro que al tratarse de una zona muy propensa a lesiones, hay que asegurarse de que se trata verdaderamente de la enfermedad de Sever, para lo que normalmente se suele pedir una radiografía u otra exploración complementaria para estudiar el estado del hueso o de las partes blandas y descartar otras alteraciones como pueden ser tendinitis de Aquiles o bursitis calcánea, por poner dos ejemplos.
El tratamiento básicamente consiste en eliminar o aliviar el dolor del niño, dado que la dolencia desaparece cuando el crecimiento del calcáneo ha finalizado, sin dejar ningún tipo de secuelas. Así que, lo único que se puede hacer aplicar hielo en la zona, utilizar taloneras blandas, medicación o en casos más graves, probar con la fisioterapia.